1 La ruina es lo único que define la mala situación. En el fuego no se cuecen las patatas con la coliflor. La despensa es tan amplia como el desierto los días de calor. Se apaga el frigorífico al sacarle el último chuletón. El teléfono los asusta con la voz del casero gruñón. Abren la ventana y ven el fin desde el se acabó. 2 Él se hunde en sus pensamientos y ella despierta de la depresión. Le tira el mandil al último plato y corre a peinarse con la ilusión. Del fondo de armario saca un vestido para disfrazarse de sé un montón. Llega a la entrevista con cara de niña y le pone nombre al enchufador. Esta vez funciona el papel currículum gracias a un enchufe que le da calor. 3 Empiezan a habitar los stocks la nevera gracias a un sueldo dividido en dos. El postre aparece tras el primer plato y es celebrada su aparición. Un día él encuentra una ocupación como hombre-chapuzas de un barrio mejor. Entonces mejoran el pobre menú con pescado fresco, carne y jamón. Vuelven a sentirse clase media los dos y van olvidando los tiempos de horror. 4 Las noches vuelven a ser noches llenas de amor, libres del frío que había entre pijama y camisón. No hay hielo caminando de la cocina al salón, ni llega un interrogante abriendo la preocupación. Se multiplican los besos entre palabras de amor; al olvido va pasando la última discusión. Miedo tuvo, ya no tiene, del fin de un sí pronunciado en una boda de iglesia, cola y vestidos blancos. |
Feliz 2020!
Hace 5 años