Compartirte es perder un trozo
de tarta en un arco iris
que un día trae lluvia
y otro día nieve fría.
Te voy atando los pies
con la red de los delfines
para reducir tus bailes
a mis canciones malditas.
La otra va por el túnel
donde queda el arco iris
llorando por una nube
que le congeló el frío.
Despiertas de la aventura
y ya no cae una arista
del triángulo que fuimos
tú, ella y mi arco iris.
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