Siento el limón
que bebe mis labios,
me borra la risa,
apaga mis ganas.
Estoy derrotada.
Los brazos cansados,
las manos heladas,
mis pies se arrastran
cansados, cansados,...
¡Maldito este día!
Agarro en las uñas
la rabia y el hambre
y mato en los dientes
la última lágrima.